Puma
El puma es el felino que tiene mayor distribución geográfica en Argentina.
Nombre: Puma
Nombre científico: Puma concolor
Familia: Felidae
Alimentación:El puma es un carnívoro versátil y oportunista, adaptado a cazar una amplia variedad de presas según su entorno. Su dieta principal está compuesta por mamíferos medianos y grandes, como ciervos, guanacos, vicuñas y ñandúes. Sin embargo, su flexibilidad alimenticia le permite incluir en su alimentación animales más pequeños, como liebres, vizcachas y otros roedores, aves e incluso reptiles, especialmente en áreas donde las presas grandes son escasas.
Este felino utiliza técnicas de acecho y emboscada para cazar, aprovechando su agilidad, sigilo y fuerza. Generalmente, caza durante el amanecer o el atardecer, horarios que le ofrecen mayor ventaja. Una vez que captura su presa, la arrastra a un lugar seguro donde puede consumirla durante varios días, cubriéndola con vegetación para protegerla de carroñeros.
Gracias a su dieta diversa, el puma puede habitar en una gran variedad de ecosistemas, desde montañas y selvas hasta desiertos y estepas, demostrando su capacidad de adaptación como uno de los principales depredadores de la fauna argentina.
El puma es uno de los depredadores topes de Argentina (junto con el yaguareté).
Hábitat: El puma es un animal muy adaptable, esto le permite habitar una amplia variedad de ecosistemas en América. Desde las frías montañas de los Andes hasta las densas selvas tropicales, pasando por desiertos y llanuras. Este depredador encuentra refugio en territorios que ofrecen abundantes presas y poca presencia humana. Su rango de distribución, que se extiende desde Canadá hasta el sur de Argentina y Chile, lo convierte en uno de los mamíferos terrestres con mayor amplitud de hábitat en todo el mundo.
Distribución geográfica en Argentina: El puma tiene presencia en todas las provincias de Argentina, siendo más abundantes en zonas de montañas de la pre cordillera, estepa patagónica, serranías del centro del país, yungas, bosque chaqueño y selva misionera. En los últimos años aumentó el registro de pumas en la región de la Pampa Húmeda, entre otras razones se debe a la migración de familias campesinas a la ciudad debido al desarrollo de los cultivos intensivos.
Algunos parques nacionales donde habitan pumas: Parque Nacional Lihue Calel (La Pampa), Parque Nacional San Guillermo (San Juan), Parque Nacional El Impenetrable (Chaco), Parque Nacional Patagonia (Santa Cruz), Parque Nacional Los Alerces (Chubut), Parque Nacional Nahuel Huapi (Río Negro), Parque Nacional Copo (Santiago del Estero), Parque Nacional Baritú (Salta), Parque Nacional Calilegua (Jujuy).
Características: El puma es un felino grande, aunque menor en tamaño que los yaguaretés. Los adultos pueden medir entre 1,5 y 2,4 metros de largo, incluyendo la cola, y a pesar de entre 25 y 80 kilogramos, dependiendo de su ubicación y sexo. Los pumas pueden variar de tamaño según la ecoregión que habiten, por lo general los pumas del sur son de mayor tamaño que los del norte del país. Su pelaje es corto y uniforme, con un color que varía del beige al marrón rojizo, aunque las crías nacen con manchas que desaparecen a medida que crecen.
Comportamiento: El puma es un animal ágil y silencioso, capaz de correr a gran velocidad, saltar largas distancias y trepar árboles para acechar a sus presas o evitar amenazas. El puma es solitario excepto durante el período de reproducción o cuando una hembra cuida de sus crías. Cada individuo establece un territorio que varía en tamaño dependiendo de la disponibilidad de presas y recursos. Los machos suelen ocupar áreas más grandes que pueden abarcar cientos de kilómetros cuadrados, mientras que los territorios de las hembras son más reducidos. Estos territorios se sobreponen parcialmente, pero los pumas evitan encuentros directos entre sí. Utilizan marcas de orina, heces y rasguños en árboles para delimitar su territorio y comunicar su presencia.
Es un felino capaz de modificar sus hábitos en respuesta a la presión humana. En áreas donde convive con humanos, suele evitar los encuentros reduciendo su actividad diurna y desplazándose durante la noche. Debido al despoblamiento de zonas rurales en algunos lugares del país el puma está reconquistado territorio. Sin embargo, el puma enfrenta amenazas como la caza y la pérdida del hábitat.
Estado de conservación: Preocupación Menor.
Conflicto con pumas
El conflicto entre los pumas (Puma concolor) y las comunidades humanas es un tema de creciente relevancia en la conservación de la biodiversidad y la gestión del desarrollo rural. Este enfrentamiento se origina principalmente en áreas donde las actividades humanas, como la ganadería, la agricultura y la expansión urbana, se superponen con los hábitats naturales de estos grandes felinos.
Una de las causas más comunes del conflicto es la depredación de animales domésticos, especialmente en zonas rurales. La pérdida de presas naturales debido a la fragmentación del hábitat y la caza excesiva obliga a los pumas a buscar alternativas en el ganado, lo que genera pérdidas económicas significativas para los productores. Como respuesta, los ataques a pumas suelen ser inmediatos, ya sea mediante cacería directa o el uso de trampas y venenos, agravando el declive de las poblaciones de esta especie en algunas regiones.
Además, el crecimiento de las áreas urbanizadas exponen a los pumas a riesgos adicionales, como atropellamientos en carreteras, pérdida de corredores biológicos y encuentros directos con humanos. Estos incidentes suelen intensificar la percepción negativa hacia el animal, considerado en algunos casos como una amenaza directa para la seguridad humana, aunque los ataques a personas son raros.
La solución a este conflicto requiere un enfoque integral que combine la conservación de los ecosistemas con prácticas para proteger los intereses de las comunidades humanas. Entre las estrategias más efectivas se encuentran la implementación de cercas reforzadas, la adopción de técnicas de pastoreo vigilado, el uso de animales guardianes (como los burros) y la promoción de corredores ecológicos que permitan el libre movimiento de los pumas sin interferir con las actividades humanas. Asimismo, la educación y sensibilización de las comunidades sobre la importancia del puma como regulador del equilibrio ecológico es fundamental para construir una convivencia armónica.
Fotos: Reserva Guaycolec (Formosa).